Nos vamos a meter con
un juego familiar, de rapidez, tanto visual como de movimientos.
Tenemos cinco piezas:
un fantasma blanco, un libro azul, una botella verde, un sillón rojo y un ratón
gris. Dichas piezas se colocan en el centro de la mesa y al lado el majo de
cartas. Las cartas tienen dos figuras dibujadas. En cada ronda se destapa la
carta y el primer jugador que coja la figura correcta se queda con esa carta.
En las cartas veremos:
- que una de las
figuras coincida con la figura y su color (por ejemplo un fantasma blanco, por
lo que quien coja el fantasma se queda con la carta).
- que falte una figura
y un color (por ejemplo que en la carta salga un ratón rojo y una botella
blanca, por lo que la figura correcta es el libro azul).
Cuando el mazo se
acaba se acaba el juego y se cuenta quien tiene más cartas… sin más. Sencillo,
fácil y divertido. Un juego, que con mi escasa rapidez de movimientos no soy
muy partidario de jugar…
Y para cabar, comentar que hay varias versiones, en las que cambian las figuras, pero siempre hay un fantasma blanco, o una expansión que mete más figuras y cartas más complejas...
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