En estas fiestas he estado
jugando, aunque solo he podido probar uno nuevo. Se trata de The Gallerist, un
juego de los más esperados en el recientemente fallecido 2015 que salió
adelante gracias a un Crowdfunding. Es
un juego de simulación, por lo que no es apto para toda la familia y todos los
jugadores por su complejidad. En este juego cada jugador (de 2 a 4 jugadores)
toma el papel de un galerista de arte que tiene que despuntar ganando dinero a
base de promocionar artistas, comprar y vender obras de arte, hacer negocios
internacionales, pujas, etc.
Se despliega
el tablero central y cada jugador recibe el tablero de su galería, dos
trabajadores, el icono que lo representa y dinero. Al azar se elige el jugador
inicial que lo será para toda la partida. Todo jugador, en su turno tiene una
acción principal (que se juega en el tablero central) y una secundaria (que se
juega en el tablero de su galería). Además, a cada jugador se le repartirá dos
cartas de objetivos, una con los tipos de obras que tendrá que tener expuestas
en un momento determinado y otra con los tipos de obras que tendrá que vender.
Las obras de
arte son de cuatro tipos: escultura, pintura, fotografía y arte digital. Al
azar se colocaran 8 artistas, 2 de cada clase, que a su vez uno será un artista
desconocido y otro un ya consagrado. Los primeros tienen obras muy baratas,
pero será más costoso promocionarlos, mientras que los otros será al revés.
En la plaza
central se colocan varios especialistas que representan a los expertos que nos
ayudarán a avanzar con nuestra galería, la cual tiene dos partes importantes,
el hall de entrada y el interior. A lo largo del juego iremos ganado tiques de
un color determinado que servirán para meter a esos especialistas de la plaza a
nuestro hall, de nuestro hall al interior o (para hacer la puñeta) del hall de
un rival a la plaza. Los especialistas en el hall son asesores externos que nos
ayudaran en cosas como los negocios internacionales y en cualquier momento se
pueden ir. Los que están en el interior son los que tenemos en plantilla para
siempre y ayudarán a ganar dinero o prestigio tras una venta. Todo jugador
empieza con un especialista en su hall).
También habrá
cartas de contratos. Antes de vender una obra de tu galería tienes que redactar
un contrato. La redacción de contrato da la opción de una acción secundaria (si
colocas un trabajador) y tras la venta da una bonificación.
En su turno
el jugador, como acción principal, puede colocar su avatar en una casilla donde
podrá elegir una de las dos opciones que la casilla deje:
- Descubrir
un nuevo artista o comprar la obra de uno de los ya conocidos. Al descubrir un
artista te llevas su icono de firma. La primera obra que le compres lo harás
por el precio más bajo que tenga el artista. En cuanto a la compra de una obra,
el precio depende del prestigio del artista. Además la obra genera una serie de
bonificadores y lleva consigo unos nuevos especialistas que entran en escena
(plaza central).
- Redactar un
contrato de venta o vender una obra. Ya hable arriba de que se trata lo del
contrato. O vender una obra, dependiendo del prestigio que tenga el artista.
Por lo que es interesante subirle lo más posible el prestigio para ganar mucho
dinero. Además, la venta acarrea más subidas de prestigio del artista.
- Promocionar
a un artista o contratar a un nuevo trabajador. Promocionar un artista hace que
sea famoso y gane más prestigio. O contratar a un trabajador, gastando dinero,
pero que genera algún tipo de bonificación.
- Hacer
negocios internacionales o pujar. Al pujar, cada uno invierte un dinero y gana
un bonificador fijo, dejando un trabajador, y al final de la partida quien más
haya pujado se lleva a su galería una obra de arte a su elección, el segundo la
segunda, el tercero la tercera y el cuarto anda. Para hacer negocios
internacionales hay que cumplir una serie de requisitos (tener o haber tenido
una obra de un tipo determinado y tener una serie de especialistas en el hall
de su galería) y si se cumplen colocará uno de sus trabajadores en la casilla correspondiente
y llevarse el bonificador.
En cuanto a
las secundarias, son la de aprovechar a un trabajador desocupado para que se
encargue de un contrato ya redactado o la de gastar los tickets para atraer
especialistas.
Si un jugador
entra en la casilla de acción y está ocupada por otro, este otro tendrá que
volver a su galería, pero antes tiene derecho a una acción, ya sea principal en
esa casilla gastando prestigio propio o secundaria en su galería.
El juego se
acaba cuando se acaban los tickets y una de las pilas obras. Entonces cada
jugador recibe dinero si ha hecho mejor puja, mas negocios internacionales, si
se ha cumplido objetivos de las cartas, etc. Quien más dinero ha ganado, gana
el juego.
Como veis es
un juego complejo (me he saltado algunas cosas secundarias porque sin me tiro
todo el día escribiendo). Es un juego con mucha miga, tienes muchas estrategias
para avanzar y representa bastante bien al trabajo de un galerista y el mundo
del arte. En cuanto al material, se nota la calidad de las piezas y del
tablero. También es un juego en el que hay que llevar bien la frustración,
porque los recursos son escasos y es habitual quedarse sin dinero ni reputación
y tener un par de turnos que tienes que marear la perdiz con otras opciones.
Como inconvenientes,
la complejidad y cantidad de reglas y opciones hacen que no todo el mundo entre
en este juego y puede ser difícil empezar a jugar por primera vez y hay
momentos que las reglas llevan a lio o a olvidar algo, haciendo que cometas
errores. Tampoco es un juego acto para indecisos, para el juego para tomar
decisiones hace que pierda su dinamismo y lo convierte en algo aburrido (doy fe
de esta situación, lo que ha hecho que no haya cogido especial cariño a este juego).
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